“Por ello, el habitáculo de la prensa debe estar orientado hacia el sur de forma que no haya necesidad de encender fuego ni lucernas mientras se prensa la aceituna”.
(Columela, De re rustica, 1,16,18)
La villa romana de Los Villaricos en el término municipal de Mula (Murcia) se desarrolló entre los siglos I y V. La zona excavada se divide en dos áreas. En la primera o espacio residencial se distinguen una zona termal destinada a los baños fríos, al norte, y a las habitaciones calefactadas y sus dependencias de servicio, al sur y poniente y otra habitacional entorno al núcleo central de un patio interior rodeado por un pasillo de distribución al cual se abren la mayoría de las estancias.
Destacan las habitaciones del lado sur, donde dos de ellas aparecen con pavimentos de mosaicos policromos decorados con motivos geométricos y la gran habitación situada en el eje norte confrontada a la entrada principal que debió asumir una función de representación (oecus-triclinium). Mención especial merece la localización de un aljibe subterráneo en perfecto estado de conservación, que almacenaba el agua de lluvia
En la segunda área, situada al SE del yacimiento se ha documentado un gran torcularium (almazara) para producir aceite. El edificio principal, la almazara más grande documentada de la Hispania romana, tiene unas dimensiones de 39 m. de largo por 17 m. de ancho, con un total de 663 m2, en que se han hallado “hasta ahora” tres grandes naves dedicadas al prensado de la aceituna, con cinco prensas de viga, al área de accionamiento de las prensas, con cinco contrapesos y a la zona de decantación del aceite, con seis piletas y tinajas.
Una vez abandonada la villa, el área residencial se convertirá en un lugar de culto con la transformación de dos estancias en un edificio de planta basilical, en torno al cual se han documentado numerosos enterramientos.
¿Cuándo se puede visitar esta villa?